Funcionamiento y conceptos básicos

Cuando hablamos de transmisión automática, hablamos de un sistema que efectúa cambios de marcha sin necesidad de que el conductor intervenga de modo alguno. Para lograrlo, el sistema de transmisión automática utiliza fuerza centrífuga. Esta fuerza centrífuga se crea cuando aceite automático a presión sale expulsado de una turbina que va unida al motor hacia una turbina va unida a la transmisión. Las turbinas no se tocan, es por esto que no se necesita embrague. Si el aceite automático no estuviera presente, las turbinas tendrían problemas influenciando el movimiento de la otra. Esta es la función principal de esta sustancia.

Funciones adicionales

El aceite automático se encarga, además de influir directamente en la capacidad que tiene una turbina de romper la resistencia de la otra, de lubricar todo el sistema de transmisión automática. La falta de aceite automático puede provocar entonces que el sistema no funcione de forma correcta y puede provocar también daños irreparables producto de temperaturas elevadas. De que haya una cantidad suficiente de aceite automático en la bomba hidráulica depende que sistema funcione correctamente. Es necesario verificar y cambiar aceite automático al menos una vez cada 15 mil o 20 mil kilómetros. Recuerde que quedarse sin cambios es peligroso.

El mejor lugar para comprar

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